Descripción del sendero
Muy cerca del pueblo de Cazorla, nos encontramos con este sendero que nos adentra en pleno corazón del valle del Alto Guadalquivir, que aquí aún es un riachuelo de aguas cristalinas.
Recorrer estos parajes es adentrarse en un mundo de abruptas elevaciones y densos bosques, el típico paisaje de la Sierra de Cazorla. Esta orografía nos permite divisar tierras lejanas como si estuviéramos en una atalaya.
El sendero comienza en el kilómetro 32 de la carretera A319 dirección El Tranco. Es conocido en el lugar como Empalme del Valle y por debajo de esta área recreativa del mismo nombre 1 ver en el mapa. allí existe un ensanche donde aparcar el coche, pero tendremos cuidado de no dejar el vehículo obstaculizando la entrada al deposito de agua, que es utilizado para cargar los camiones contra los incendios forestales. Nosotros podemos recoger agua para nuestra caminata en la fuente que hay junto a la represa.
Ascendemos unos doscientos metros por una estrecha senda mientras escuchamos el agua alrededor. Nos adentramos en una frondosidad de pinos, majuelos, algún nogal y, en el sustrato inferior, helechos y otras especies herbáceas como las prímulas, que resaltan con sus flores amarillas en la época primaveral. Enseguida llegamos a un cruce 2 con otras pequeñas sendas que nos acercan a la carretera que lleva a Vadillo Castril. Continuamos ascendiendo por nuestro sendero hasta alcanzar una zona despejada donde tenemos una vista muy completa del valle del Guadalquivir. En la panorámica que se abre ante nosotros destaca, al fondo, la silueta del Yelmo, perteneciente a la sierra de Segura o mas hacia la izquierda, la del Blanquillo de la sierra de las Villas.
Collado del Oso
Continuamos caminando seiscientos metros y ahora el sendero va ganando altura, haciendo zig- zag en una ladera que, en primavera, se cubre de helechos y donde grandes y rectos pinos salgreños hacen del lugar un bosque con cierto misterio.
Nos acercamos al Collado del Oso 3 que, con sus 1225 metros, es el punto mas alto de nuestro sendero. A su izquierda queda el denominado cerro del Oso. Antes de coronar el collado, a nuestra izquierda, veremos un pino sagreño de gran parte, de cuyo mismo pie salen copas. En la sierra, a estos ejemplares se les se les denomina mergizos. También observamos que parte de sus ramas están cortadas. En épocas pasadas las cortaban de una curiosa forma, ayudándose de cuerdas; estas ramas se utilizaban como leña. Una vez rebasado el puerto, cambiaremos de vertiente y de paisaje. Si nos fijamos, los pinos ahora son de otra especia, pináster o resineros, y están acompañados de quejigos, chaparros, majuelos, romeros, rosales silvestres, etc.
El paisaje como recompensa
Este sendero es un continuo mirador natural; un observatorio para quien prefiera profundizar, contrastar y concluir sobre aquello que ve en cada momento. En cualquier caso, el paisaje no dejara a nadie indiferente. Es como una composición de todo lo que ha allá fuera, multitud de pequeñas y grandes cosas encajando inexplicablemente como si se tratara de un puzle. Lo geológico, lo hidrográfico, lo climático lo astronómico, lo que vive y que por ello muere, o que permanece en el tiempo y lo que varia mientras curioseamos, lo humano por doquier, todo en uno, eso es el paisaje.
toda una recompensa al esfuerzo, dependiendo, eso sí, de la visibilidad. Si es un día despejado veremos las cumbres de la sierra de Segura y de las Villas, los Poyos de la Mesa y otros picos de la sierra del Pozo. Todos con sus laderas tapizadas de vegetación. Mas cerca podremos disfrutar del Valle del Guadalquivir en sus tramos alto, el rumor del agua y los sonidos del bosque.
Fuente del oso
Al poco llegaremos a una zona más despejada, donde podríamos para un rato y, utilizando algún plano de la zona para identificar los picos que tenemos delante. De nuevo, es el del valle del Guadalquivir el que nos separa de las cumbres que vemos: destacamos la Mesa justo enfrente y, hacia la derecha, la loma de la Mesa, la peña de los Tornillos, el pichón de los Halcones; por encima de este, sobresale el calar de Juana. Y, ya al final, se alza la curiosa silueta del cerro de la Tableta, perteneciente a la cuerda del Cabañas.
Continuamos bajando por este bello sendero de herradura otros seiscientos metros hasta que llegamos a un cortafuegos 4 que recorre toda la ladera hasta Vadillo Castril. Ya veremos el final del sendero. Es el agradable paraje de Fuente del Oso 5, donde podremos beber agua y descansar en la sombra de alguna noguera. En este mismo punto comienza otro sendero, el de Fuente del Oso-Puente de las Herrerías.
cómo llegar
Desde Cazorla tomar la A319 en sentido noroeste hacia el embalse del Tranco de Beas. Tras recorrer unos 17 km y haber pasado el puerto de las Palomas descenderemos a un cruce llamado el Empalme del Valle. En este cruce se encuentra un área recreativa con el mismo nombre desde donde se iniciaba el sendero.
Aparcamiento
Hay un aparcamiento con unas 8 plazas al inicio del sendero.
Datos técnicos
- TRAYECTO: Lineal
- LONGITUD: 1,7 km
- TIEMPO ESTIMADO: 50 min
- DIFICULTAL: Media
- TIPO CAMINO: Senda
- PAISAJE / VEGETACION: Pinares y bosque mediterráneo. Elevaciones calizas. Valle boscoso. Fuentes
- SOMBRA: abundante
- AUTORIZACION ESPECIAL: No es necesaria
- DESNIVEL MAXIMO: 157m
- COTA MAXIMA: 1.235 m
- COTA MINIMA: 1.078m
Otros senderos cercanos
El sendero finaliza en el punto de inicio del sendero Fuente del Oso – Puente de las Herrerías . además, el parque natural ofrece otros recorridos para los senderistas. Entre los más próximos están el Sendero de la Central Eléctrica y el sendero de la Cerrada del Utrero.
Buenas prácticas y recomendaciones
Llevar Agua Potable Y Vestimenta Y Calzado Adecuados. cerciorarse de la potabilidad del agua de las fuentes